La dinámica del mundo hoy, nos lleva a ir a una velocidad que no permite que podamos detenernos a mirar nuestra evolución de manera consciente, tampoco nos permite parar, para pensar en lo que debemos hacer para alcanzar nuestro propósito o misión de vida. Muchas personas se funden en el olvido y encienden su piloto automático, otras se convierten en motores dinámicos multitareas, que no les permite disfrutar del camino ni de cada momento o instante importante para su vida, ¿a qué grupo perteneces tú?

Si estas en el primer grupo, sientes que tu vida es una carrera sin sentido frecuentemente, lo que te lleva a sufrir, decepcionarte y vivir en ansiedad y miedo, y si, te identificas con el segundo grupo, nada de lo que haces te satisface y no te sientes suficiente; existe entonces también, un grupo que se conecta con su verdadera esencia, con su luz y recorre el camino hacia su despertar o propósito de vida.

De esta manera, estamos en un mundo rodeado de personas que tal vez poseen un bajo nivel de consciencia, que los aleja de su dimensión espiritual y evolutiva, para sumergirlos en personas aisladas de sí mismas, personas tensas, abstraídas, recargadas de pensamientos involuntarios y compulsivo, en su mayoría no están presentes. Su atención está en el pasado o en el futuro, lo que genera procesos ansiosos o estados depresivos, por tanto, permanecen pensamientos recurrentes tóxicos y limitativos.

Sólo el darse cuenta de esa situación, de estar conectado mas tiempo con el pasado y con el futuro, que con el presente, comienza la oportunidad de hacer cambios y elevar el nivel de conciencia, es decir, inicia el proceso de despertar a una nueva conciencia y comienza la etapa del reconocimiento personal y el autoconocimiento; Inicia la conexión con la vida, con su ser superior, y con su propósito, con el poder de manifestar y de estar presente. Eckhart Tolle, dice que: “una parte esencial del despertar es el reconocimiento de tu yo no despierto, el ego que piensa habla y actúa. Cuando reconoces en ti la inconsciencia, lo que hace posible ese reconocimiento es la conciencia que emerge, es el despertar”.

Te compartimos cinco claves para poder permanecer en presente:

1. Encontrar el propósito interior: la vida tiene un propósito interior y otro exterior; el interior se refiere al ser, y es primario; el exterior se refiere a hacer y es secundario; tu propósito interior es despertar a la conciencia, y vivir de acuerdo con este propósito te hará algo auténtico y te dará felicidad.
2. Evita estar a la expectativa constantemente: es posible que mientras estás esperando que ocurra algo importante en tu vida, no te des cuenta de que dentro de ti ha iniciado la separación de los pensamientos recurrentes tóxicos y la elevación de tu conciencia.
3. Conecta tu propósito interior con tu pasión: te empoderas cuando logras conectar tu propósito interno (la esencia del ser), con tu pasión (la esencia del hacer).
4. Establece metas y objetivos claros: desarrolla un plan de acción para alcanzar tus propósitos y metas de vida.
5. Vive y disfruta la vida: el mayor éxito del arte de vivir es disfrutar el camino en el aquí y el ahora, es disfrutar de permanecer presente en cada instante que vives.

“Yo no soy el contenido de mi vida. Yo soy vida. Yo soy conciencia. Yo soy el ahora. Yo soy» 

Eckhart Tolle

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Carmen Julia