Si ahora no te sientes valorado por los demás puede que pienses que no eres suficiente o que los otros son unos interesados. La realidad es que solo es una proyección del valor que tú mismo te estimas. Si pasas la mayor parte de tu tiempo enfocado en mirar el modo que los demás se comportan contigo y estás analizando si las personas te valoran y admiran lo suficiente para concluir que “no has sido valorado como mereces” o que “no recibes la admiración que te corresponde” y comienzas además a preguntarte, ¿Qué tengo yo de malo? ¿Por qué justamente a mí no se me valoraban lo suficiente?, etc.
Es momento de que sepas que cuanto menos valor sientes por ti, más empeño pondrás en hacer lo necesario para que los demás aprecien tus acciones y así creas que otros te darán el valor que mereces y quieres, para ser reconocido y apreciado, “das todo” y crees no recibir nada, según tu apreciación, sientes ingratitud de tu entorno y se manifiestan una serie de emociones densas que se apoderan de ti. Comienzas entonces a sentirte insuficiente, a sentir molestia, ira y rencor hacia aquellos que no parecen capaces o dispuestos a percibir y agradecer todo lo que haces por ellos, eso crea malestar en tu autoestima, autoconfianza y también deteriora tus relaciones con otros.
Cuando no reconoces tu valor y te admiras a ti mismo, eres reactivo, reprochas y te frustras por no comprender ese “supuesto” trato injusto que recibes, pues si constantemente das para recibir desde el temor y la angustia, la ansiedad que se genera en ti y el cansancio hará probablemente que te sientas desvalorizado por mucho que hagas por los demás.
Para superar esta situación, la necesidad de sentirte valorado y admirado, quiero plantearte cinco preguntas, para que te regales un tiempo para responder, al hacerlo, toma una respiración profunda y consciente (inhala por la nariz, cuenta hasta tres, reten, cuenta hasta tres, exhala por la nariz, cuenta hasta tres; repite la respiración dos veces más); estoy segura de que te harán reflexionar positivamente:
1. ¿En verdad crees que los demás no te valoran?
2. ¿Realmente tú te valoras? ¿Proyectas tu valor en los actos de los demás?
- ¿Eres capaz de valorarte tú internamente?
- ¿Estás depositando tu autoconcepto en el modo en que se comportan los demás contigo?
- ¿Te comportas con los demás del mismo modo que quieres que ellos se comporten contigo?
Toma tu tiempo y permite a través de tus respuestas liberar la necesidad de creer que los demás no te consideran. Te voy a compartir, además, cuatro claves para aumentar tu autovalor de manera que logres alcanzar tu estima, admiración y felicidad.
Primera clave, cambia la manera que miras tu ser interno, el mundo que ves es un reflejo del modo en que te ves a ti mismo, lograras así empoderarte para hacer todos los cambios que desees en tu vida. Aquellas personas que llevan amor en su interior y se valoran a sí mismas, perciben a los demás con amor y alta estima.
Clave número dos, busca tu valor personal dentro de ti mismo: si permites que el concepto de tu valor se vea afectado por la forma en que los demás se comportan contigo, siempre dominarán los demás. Si cuantificas lo que vales según la escala de valores y admiración de terceros, perderás la libertad de ser tú mismo y así nunca podrás ser feliz, buscando lo que eres, lo que vales en el comportamiento de los demás.
Es difícil recibir de los demás lo que tú mismo no tienes: seguro has escuchado esto: “trata a los demás del mismo modo en que quieres que ellos te traten”, parece fácil, pero esta es la tercera clave, para recibir algo, hay que saber dar de manera similar, ¿Quieres admiración?: ¡Admira a los demás pues toda persona tiene alguna cualidad digna de admiración! ¿Quieres resaltar tu valor?: ¡Valora a los demás pues todo ser humano tiene algo por lo que ser valorado! ¿Quieres amor?: ¡Ama a los demás sin condiciones!
Es imprescindible comprender que el amor propio no es egoísmo, que es saludable tenernos en primer lugar. Si quieres sentir tu valor, empieza a valorarte tú.
Concéntrate en ti, escucha a tu cuerpo para saber lo que quieres y necesitas exactamente en cada momento y bríndaselo. No temas decir no, no te sientas culpable por tus elecciones y por establecer límites necesarios. Cuando tú te valores los demás comenzarán a apreciar y agradecer lo que puedes ofrecer. Entonces llega el momento en que no te preguntarás que hay de malo en ti porque sabrás que no hay nada malo. Cuando tú te reconoces no necesitas el reconocimiento de los demás.
Toma responsabilidad por tu vida y recuerda, la forma en la que cuidas de ti mismo, “el autocuidado”, es la cuarta clave, una de la más importantes para contribuir con tu autoestima, aplícala:
- Identifica tus fortalezas, habilidades, dones y talentos.
- Registra tus logros.
- Haz planes laborales realistas a corto, mediano y largo plazo.
- Reconócete vulnerable y permítete equivocarte.
- Pide apoyo si lo necesitas.
- Trátate de manera amorosa.
- Celebra tus avances.
- Se paciente contigo mismo.
- Evita la autocrítica negativa.
- Reconoce tus emociones y permítelas.
Pregúntate, ahora…
¿Te estás cuidando, valorando y admirando tanto como cuidas a los demás?
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Carmen Julia Rebolledo T.
Coach Holístico| Coach de Vida
CEO CReCEmpresa Internacional